Reformas modificarían expectativas de crecimiento de México: Carstens

(Ampliación) * Mantiene entre 3.0 y 4.0% pronóstico para 2013 México, 13 Feb. (Notimex).- El Banco de México (Banxico) mantuvo su pronóstico de crecimiento para 2013 en un intervalo de 3.0 a 4.0 por ciento, aunque este podría modificase si se dan reformas estructurales en el país y empiezan a implementarse. El gobernador del Banxico, Agustín Carstens, informó que para 2014 espera un avance de la economía de 3.2 a 4.2 por ciento, aunque precisó que estas tasas muestran una desaceleración respecto al crecimiento de 4.0 por ciento calculado para 2012. Al presentar el “Informe sobre la inflación, octubre-diciembre 2012”, consideró que gran parte de 2013 y 2014 la inflación se situará en niveles cercanos a la meta de 3.0 por ciento, aunque se prevé un aumento transitorio en los primeros cuatro meses de este año. Además, el Banxico elevó su previsión de creación de empleos formales para 2013 a un intervalo de entre 550 mil y 650 mil, desde los 500 mil a 600 mil calculados en el informe previo. Lo anterior, debido al impacto de la reforma laboral recién aprobada, y para 2014 se espera un aumento de 700 mil a 800 mil trabajos formales. Aclaró que aún hay una buena parte de riesgos que podrían sorprender a la baja al crecimiento económico mundial, pues no puede descartarse un menor crecimiento en Estados Unidos o que se profundice la recesión en Europa, además de que las economías emergentes podrían desacelerarse. A nivel interno, consideró positivo el “proceso alentador” en México de materializar reformas estructurales importantes, un factor que de continuar podría contrarrestar de manera muy importante los riesgos externos. “Dado que todavía hay vulnerabilidades en el entorno externo, si es muy importante continuar con este buen paso que se ha empezado a mostrar en el proceso de reformas estructurales, y que eso coadyuve a contrarrestar el lastre que la economía mundial continuará siendo sobre la economía nacional y las economías de otros países”, señaló. Sobre la inflación, informó que el Banxico espera que este y el próximo año se ubique en niveles cercanos a la meta de 3.0 por ciento, aunque dada la evolución en 2012 se anticipa un aumento transitorio al final del primer trimestre y principios del segundo trimestre de 2013, y que en los meses subsecuentes este efecto se revierta. “Por eso estamos hablando, para todo el año en su conjunto, de niveles cercanos a la meta de 3.0 por ciento, aunque sí, en el resto del primer trimestre e inicios del segundo, podríamos tener una tasa de inflación ligeramente más alta”, precisó Carstens. Por otra parte, aclaró que “no es una decisión tomada” una posible reducción en la tasa de interés de referencia, lo que dependerá de que continúe el comportamiento favorable de la inflación, que en el mediano y largo plazos se mantenga el proceso de convergencia hacia la meta permanente de inflación, de 3.0 por ciento. “En todo caso, la Junta de Gobierno (del Banxico) se mantendrá muy vigilante a la evolución de todos los factores que podrían afectar a la inflación, con el fin de estar en condiciones de alcanzar el objetivo permanente de 3.0 por ciento”. Insistió en que para acelerar el crecimiento de la economía mexicana y tener capacidad de avanzar más sin generar presiones inflacionarias, “es muy importante que se continúe con el proceso de reformas estructurales” que incrementen la productividad desde el punto de vista macroeconómico y, en general, aumenten el PIB potencial. Para el gobernador del Banxico, lo más importante es capturar los beneficios de estas reformas en materia de crecimiento, de creación de empleos y de abatimiento de la pobreza. Sobre su reciente declaración de que podría generarse una “tormenta perfecta” a nivel mundial, explicó que ello obedece a la combinación de factores como la entrada masiva de capitales a países emergentes, que se empieza a ver una burbuja en expansión del crédito y aumentos desproporcionados en los precios de algunos activos. En el caso de México, aclaró, “no estamos en esa circunstancia, pero eso no obsta que nosotros no debamos estar muy vigilantes para que en caso de que los flujos de capitales continúen, estar seguros de que no se generen ese tipo de burbujas, que en su momento podrían representar una vulnerabilidad desde el punto de vista de estabilidad financiera”. Reiteró que para el caso mexicano, el instituto central no ve condiciones o síntomas de una burbuja o “boom” crediticio o en precios de activos aunque, añadió, “si es un tema a revisar con mucho cuidado”. NTX/IM/RMN