Últimas cartas de Argentina y los fondos 'buitres' ante la justicia de EEUU

Argentina advirtió el miércoles a la justicia estadounidense de que no acatará un fallo que la obligue a pagar a los fondos 'buitres' que exigen cobrar bonos en 'default' desde 2001, en el marco de una crucial audiencia por esta cuestión celebrada en Nueva York.

Argentina y los fondos 'buitres' que le exigen el pago de bonos en 'default' juegan sus últimas cartas este miércoles en una audiencia clave ante la justicia federal estadounidense, que debe decidir si ratifica el fallo que exige al país desembolsar lo adeudado y que podría provocar una nueva crisis de su deuda.

Símbolo del carácter crucial de la cita para Argentina es la presencia en Nueva York del vicepresidente Amado Boudou y el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, para encabezar la representación del país ante el Tribunal de Apelaciones de Manhattan, que no se expedirá de inmediato.

Los fondos de riesgo NML Capital y Aurelius Capital esperan que ese tribunal, integrado por tres jueces, mantenga la sentencia actualmente en suspenso del juez federal Thomas Griesa que obliga a Argentina a pagar 1.330 millones de dólares de capital e intereses adeudados desde 2001.

Estos fondos, que Argentina califica de 'buitres', forman parte del grupo de tenedores de bonos en 'default' que no entraron en los canjes propuestos por el gobierno argentino en 2005 y 2010 y a los cuales se plegó más del 92% de los bonistas aceptando quitas de hasta el 75% sobre el valor nominal de esos títulos.

Tras diez años de batalla judicial, los fondos obtuvieron un fallo favorable de Griesa el pasado 22 de noviembre que les reconoció el 'pari passu' (tratamiento equitable), por el cual deben recibir el mismo trato que los tenedores de bonos canjeados a la hora de cobrar lo que se les debe.

Este fallo abrió especulaciones sobre futuras reclamaciones judiciales y puso en peligro de 'default' técnico Argentina, que apeló ante un tribunal de segunda instancia y logró la suspensión de la orden hasta que se dicte sentencia definitiva.

El pasado 28 de diciembre, el gobierno de la presidenta Cristina Kirchner ofreció reabrir el canje de su deuda en 'default' en las mismas condiciones de 2010 para que puedan entrar los fondos de riesgo y así poner fin a la cuestión.

Pero los demandantes rechazaron esa propuesta y exigen a Argentina pagar todo lo que adeuda o bien "sentarse con sus acreedores preexistentes y negociar de buena fe", algo que Kirchner se niega a hacer.

"Argentina argumenta que porque el 92% de los tenedores de bonos fueron en última instancia incapaces de resistir a la combinación sin precedentes de Argentina de no cumplir sus obligaciones, desafiar los fallos de tribunales y negarse a negociar, el resto de los tenedores de bonos debe ahora ser forzado a aceptar el canje históricamente desfavorable de 2010", dijo NML Capital.

-- Argumentos orales a la espera del fallo definitivo --

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En la audiencia de este miércoles, las partes expondrán de manera oral sus argumentos, con un tiempo dedicado además a quienes se sumaron al litigio como "interesados no parte" apoyando a Argentina, entre ellos bonistas que canjearon sus títulos, agrupados en el Exchange Bondholders Group (EBG), y el Bank of New York Mellon (BoNY), encargado de los pagos del país.

La sentencia definitiva del tribunal, que ya avaló aunque con ciertas objeciones el fallo en primera instancia de Griesa, podría demorarse hasta algunos meses. Ambas partes pueden intentar luego llevar el caso ante el Tribunal Supremo estadounidense.

Argentina ha advertido de que un fallo negativo provocaría un aumento inmanejable de hasta 43.000 millones de dólares en su deuda, al abrir la puerta a reclamaciones de los bonistas que aceptaron los canjes y se sentirán perjudicados.

Por su lado, unos juristas cercanos a los querellantes aseguraron el martes en una teleconferencia que "es muy poco posible" que el tribunal revise su interpretación del 'pari passu' tal como lo ha entendido Griesa, por lo que limitaría más bien a la aplicación de la orden del juez.

"El tribunal tiene cierta discreción para ir más allá (de lo que se apela), pero sería inusual y no hay razón de pensar que va a tratar otras cuestiones", dijo el abogado Bruce Wolfson, de Bingham McCutchen LLP.

Entre los apoyos de Argentina se encuentra el gobierno estadounidense, que introdujo a finales de diciembre un 'amicus curiae' advirtiendo al tribunal de que su decisión adopta una nueva interpretación de la cláusula 'pari passu' que es "incorrecta". La administración del presidente Barack Obama afirma que esa interpretación a favor de una minoría que no entró en el canje "va contra los esfuerzos de larga data de Estados Unidos para promover reestructuraciones ordenadas de deudas soberanas". En efecto, se teme que en caso de que se le dé la razón a los fondos 'buitres', otras reestructuraciones de deudas con importantes quitas, como la de Grecia, se tambaleen.